Tarjeta de presentación

La vida no es blanca o negra, tampoco gris o intermedia. La vida está llena de colores y matices que cada uno puede interpretar como le de la gana y le haga más feliz.

Yo he decidido verla en VIOLETA.

Un color entre lo alegre y lo romántico, que vale para la felicidad y la tristeza, es un color calmado y lleno de paz, un tono de alivio y serenidad, tanto para lo bueno como para lo malo.

Estoy un poco cansada de mi inconstancia privada para ordenar y guardar mis pensamientos. No soy capaz de llevar un diario escrito con un mínimo de sentido, ni tampoco recordar las mil y una cosas que me gustan en la vida.

Así que este pequeño lugar será un experimento sociológico, psicológico y espiritual privado que compartiré con todo aquel que tenga un minuto libre para escuchar lo poco o mucho que yo tenga que decir al respecto de la vida.

No sé qué saldrá de aquí. Solo sé que no es un blog específico sobre nada, no se centrará en un único tema, sino en todos los aspectos de la vida que me atraigan y me gusten, que me llamen la atención, me enfurezcan, molesten o me hagan pensar, sobre las cosas que haga o me gustaría llegar a hacer.

De todo un poco y de nada en particular: Pensamientos, lecturas, moda, música, fotografía, viajes, anécdotas, fiestas, gastronomía... y ocurrencias varias.

En vuestras manos está seguirle la corriente a esta loca descarriada.